El gobierno de Estados Unidos destacó hoy que recibió “con satisfacción” la decisión de la Argentina de votar a favor de una condena a las violaciones de derechos humanos en Venezuela y la aprobación de la resolución del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas que pidió elecciones libres al régimen de Nicolás Maduro.
Según expresó a Infobae un vocero de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, el gobierno de Donald Trump se mostró satisfecho ante la administración de Alberto Fernández por votar contra el régimen venezolano en la ONU y pedir la extensión del mandato de la Misión Internacional Independiente de Investigación de la ONU en Venezuela por dos años.
“El amplio apoyo global a esta resolución es una clara condena al régimen ilegítimo de Maduro y sus violaciones de derechos humanos”, dijo el Departamento de Estado.
A la vez, en Washington destacaron la resolución avalada por la Argentina y otros 21 países en la ONU que pidió elecciones presidenciales y parlamentarias libres, justas, transparentes y creíbles en Venezuela. “Estas condiciones no se pueden lograr mientras el régimen de Maduro mantenga su control ilegítimo en el poder”, añadió el vocero del Departamento de Estado.
El mensaje de Estados Unidos llegó un día después de que la Argentina avalara junto con otros 21 países una declaración en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en la que contempla el detalle de los resultados del informe del Alto Comisionado de Derechos Humanos que lidera Michelle Bachelet donde se denunciaron casos de atroces violaciones a las libertades y a las personas por parte del régimen de Maduro.
La Argentina votó a favor de este documento junto con 21 países como Italia, España, Brasil, Australia, Chile, Dinamarca, Alemania, Perú, Uruguay y Corea del Sur, entre otros. En contra votaron Venezuela, Eritrea y Philipinas. Y se abstuvieron 22 estados, entre los que figuran Angola, Camerún, India, Indonesia, México, Nepal, Nigeria y Sudán.
El documento aprobado en la ONU exigió elecciones “libres, limpias, transparentes y creíbles” en Venezuela, rechaza “todo tipo de injerencia extranjera en el plano militar, de seguridad o de inteligencia”, exorta a todos los partidos a poner en marcha “sin demora” elecciones presidenciales y revela un “estado de alerta” por la profundización de la crisis humanitaria bajo el régimen de Maduro en medio de la pandemia de COVID-19.
Esta declaración fue recibida con beneplácito por la administración norteamericana. El tema de Venezuela ya se había dialogado la semana pasada entre el canciller Felipe Solá y el embajador norteamericano, Edward Prado, en un almuerzo en el que también hablaron de las relaciones bilaterales.
El embajador norteamericano destacó en un comunicado posterior a ese encuentro que Estados Unidos reflejó la posición del Grupo de Contacto, del que la Argentina es miembro, respecto a que no existen las condiciones para elecciones libres, transparentes ni creíbles en Venezuela por las imposiciones del régimen de Nicolás Maduro.
Además, Prado compartió con Solá su preocupación sobre los abusos a los derechos humanos y la importancia de apoyar la misión de las Naciones Unidas que lidera Michelle Bachelet.
El mensaje de Estados Unidos en respaldo a la votación de la Argentina en la ONU llega en un momento de tensión en el frente opositor donde el kirchnerismo duro cuestionó con dureza la posición de Alberto Fernández.
Con la clara intención de despejar dudas o aquietar los ánimos caldeados en el kirchnerismo, el canciller Solá expresó hoy en su cuenta de Twitter que “nadie se confunda, el Gobierno mantuvo siempre la misma posición sobre Venezuela. Queremos ayudar a que los venezolanos tengan un funcionamiento pleno de sus instituciones sin interferencias externas, sanciones ni castigos unilaterales”.